Alfonso Pérez
En un informe reciente de la FAO, se revela que los precios mundiales de las commodities alimenticias experimentaron el mayor descenso en ocho años, con una disminución acumulada del 13,7% en 2023. Este fenómeno, atribuido a la recuperación de la oferta después de la guerra entre Rusia y Ucrania en 2022, se reflejó en un retroceso mensual del 1,5% en diciembre.
El índice de la FAO, que monitorea los cambios mensuales en los alimentos más intercambiados globalmente, promedió 118,5 puntos en diciembre, mostrando una reducción de 1,8 puntos en comparación con noviembre. A pesar de los incrementos en lácteos y cereales, no lograron compensar las caídas en azúcar, aceites vegetales y carnes.
Este informe destaca la significativa influencia de la oferta en la dinámica de precios y señala una tendencia anual a la baja, marcando un hito en la evolución de los valores alimenticios a nivel internacional.