Alfonso Espinosa.
Después de ganar las elecciones primarias en Nueva Hampshire, Donald Trump ha consolidado su posición como la opción indiscutible del Partido Republicano, demostrando que, tras ocho años desde su primera candidatura, no tiene rivales significativos.
A pesar de los intentos de Nikki Haley, exgobernadora de Carolina del Sur y ex embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, por presentarse como una alternativa frente al «caos» de las administraciones de Trump y Biden, sus esfuerzos han sido infructuosos. Trump está a punto de asegurarse la nominación republicana para la presidencia por tercera vez consecutiva.
