La federación deja solo a Jalisco a sus productores agricolas y ganaderos.
Salvador Mateo.
El Huracán «Otis» ha causado una tragedia en Guerrero, amenazando a Acapulco con la partida de miles de personas, el aumento de la inseguridad y daños a la industria hotelera y restaurantera que necesitan unos 300 mil millones de pesos para su reconstrucción.
Sin embargo, el gobierno de la 4T muestra una prioridad en el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas, además de centrarse en las elecciones de 2024, minimizando los estragos de «Otis».
Además, la 4T no presta atención a los daños causados por el Huracán «Lidia» en Jalisco y la sequía que afecta al estado.
Se estima que se necesitan 1,400 millones de pesos para afrontar estas crisis, pero los recursos federales son escasos.
La sequía afectaría la producción de maíz, trigo, leche y carne, en la mayoría de los municipios jaliscienses, misma que se considera la más aguda de los 30 años.
A pesar de estos desastres naturales, la 4T parece no priorizar su atención. Los afectados buscan unir fuerzas para exigir apoyo al gobierno federal.
