Redacción N360
En estos momentos, una vasta estructura de corrupción dentro de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) del Estado de Jalisco, revelaron prácticas que involucran desde el cobro de «moches» hasta el desvío de recursos públicos.
La red delictiva es presuntamente liderada por Edgar Pulido, exdirector de la Agencia de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (ASICA), Emilio Berumen, actual secretario técnico de la SADER, y Aldo León, actual director técnico de ASICA.
Las denuncias provienen de documentos y testimonios que describen un esquema de corrupción multifacético:
Los operadores del esquema solicitan a familiares y amigos su colaboración para ser contratados en la secretaría, aunque no asisten a trabajar. Las cuentas bancarias y tarjetas de nómina de estos «aviadores» son controladas por los líderes del clan para usar los fondos.
Enrique Alfaro recientemente anunció una inversión de más de 300 millones de pesos en apoyo a los productores afectados por la sequía.
Sin embargo, la corrupción rampante pone en duda el destino de estos recursos, generando preocupación sobre la verdadera efectividad de los apoyos prometidos.
El gobierno del Estado ha destinado un presupuesto histórico de cerca de 8,319 millones de pesos para 2023 con el objetivo de apoyar al sector productivo más vulnerable de Jalisco.
No obstante, la existencia de esta red de corrupción amenaza con desviar estos fondos.
